miércoles, 26 de diciembre de 2012

BALANCE ENOLÓGICO DEL 2012

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Llegan los últimos días de diciembre y todo el mundo empieza a hacer sus balances del año. Hay quienes hacen balances de tipo personal, profesional, familiar, etc. Hay muchos que están muy felices con lo que hicieron, hay muchos que se arrepienten de lo realizado y hay muchos que se ponen ambiciosas metas a cumplir en el 2013.

Haciendo mi propio análisis, yo me puse a pensar en todos los vinos que tomé en estos últimos doce meses (que fueron cerca de 1000), y me decidí a hacer un balance vínico del año 2012.

Para hacer más fácil la lectura, he ordenado todos los vinos por categorías. Dentro de cada una de ellas he agregado a su vez cuatro sub-categorías: El que más me ha gustado (independientemente del precio de mercado), el más raro o diferente (algún vino que me llamó particularmente la atención, por su estilo o factor diferencial), el de mejor RPC (notable relación entre la calidad del producto y el precio de mercado) y el gran clásico (vinos que sigo hace años, que me siguen sorprendiendo gratamente).

A continuación mis elegidos nacionales del año 2012:

TORRONTÉS:
El que más me gustó: Tukma Gran Reserva Torrontés 2010 (repite podio, nueva añada)
El más raro o diferente: Diego Murillo Torrontés 2011
El de mejor RPC: Mil Vientos Torrontés 2011
El gran clásico: Cafayate Torrontés 2012

CHARDONNAY:
El que más me gustó: Angélica Zapata Chardonnay 2008 (repite podio, nueva añada)
El más raro o diferente: Vulliez Sermet Chardonnay 2011
El de mejor RPC: Finca Las Moras Reserva Chardonnay 2010
El gran clásico: Chateau Vieux Blanco 2011

SAUVIGNON BLANC:
El que más me gustó: Rutini Sauvignon Blanc 2011 (repite podio)
El más raro o diferente: RD Sauvignon Blanc 2011 / Ultramar Suavignon Blanc 2010
El de mejor RPC: Norton Varietales Sauvignon Blanc 2012
El gran clásico: El Portillo Sauvignon Blanc 2012

OTROS BLANCOS VARIETALES:
El que más me gustó: Humberto Canale Old Vineyard Riesling 2011
El más raro o diferente: Montesco Semillón Hulk 2012
El de mejor RPC: Finca Las Moras Viognier 2011
El gran clásico: López Blanco 2012

OTROS BLANCOS DE CORTE:
El que más me gustó: Lagrima Canela 2009
El más raro o diferente: Surcado Chardonnay-Sauvignon Blanc 2011
El de mejor RPC: Estancia Mendoza Chardonnay-Chenin 2011
El gran clásico: Castel Chandon S/A

ROSADOS:
El que más me gustó: Carmela Benegas Rosé 2011
El más raro o diferente: Rosa de Maimará 2011
El de mejor RPC: Viñas de Alto Salvador Malbec Rosado Orgánico 2012
El gran clásico: Santa Julia Syrah Rosé 2012

MALBEC HASTA $100:
El que más me gustó: Auka Reserva Don Alfonso Malbec 2009
El más raro o diferente: Noble de San Javier Malbec 2012
El de mejor RPC: Trapiche Malbec 2008/09/10/11
El gran clásico: Norton DOC Malbec 2008

MALBEC DE MÁS DE $100:
El que más me gustó: Dolium Gran Reserva Malbec 2006
El más raro o diferente: Humberto Canale Old Vines Malbec 2010 
El de mejor RPC: Alta Vista Gran Reserve (Terroir Selection) Malbec 2007
El gran clásico: Luigi Bosca Malbec DOC 2007

CABERNET SAUVIGNON HASTA $100:
El que más me gustó: Decero Cabernet Sauvignon Remolinos Vineyard 2009
El más raro o diferente: Mil Vientos Cabernet Sauvignon Reserva 2010
El de mejor RPC: Viña de Narváez Cabernet Sauvignon 2009
El gran clásico: Humberto Canale Íntimo Cab. Sauvignon 2007

CABERNET SAUVIGNON DE MÁS DE $100:
El que más me gustó: Trapiche Gran Medalla Cabernet Sauvignon 2008
El más raro o diferente: El Esteco F. N. Cab. Sauvignon 2010 (repite podio, nueva añada)
El de mejor RPC: Afincado S.V. Los Aromos Cabernet Sauvignon 2008
El gran clásico: Bramare Reserva Cabernet Sauvignon 2009

SYRAH:
El que más me gustó: Las Moras Gran Shiraz 3 Valleys 2006 (repite podio)
El más raro o diferente: Desierto Pampa Syrah 2009
El de mejor RPC: Dolium Clásico Syrah 2010
El gran clásico: Trapiche Syrah Roble 2010 

MERLOT:
El que más me gustó: Finca La Anita Merlot 2009
El más raro o diferente: Domingo Molina Partida Limitada Merlot 2009
El de mejor RPC: Marcus Merlot 2011 - Sottano Clásico Merlot 2011
El gran clásico: Luigi Bosca Merlot 2008

BONARDA:
El que más me gustó: Montesco Bonarda 2010
El más raro o diferente: Inéditos Bonarda Pura 2012
El de mejor RPC: Durigutti Bonarda Clásico 2009
El gran clásico: Colonia Las Liebres Bonarda 2011

TANNAT:
El que más me gustó: Laborum Reserva Tannat 2009
El más raro o diferente: Fin Single Vineyard Tannat 2007
El de mejor RPC: Quara Tannat 2011
El gran clásico: Don David Tannat 2009

PINOT NOIR:
El que más me gustó: Alma Negra Pinot Noir 2009 (repite podio)
El más raro o diferente: Zorzal Pinot Noir 2011 - Maula Pinot Noir Oak 2011
El de mejor RPC: Los Clops Pinot Noir 2012
El gran clásico: Luigi Bosca Pinot Noir Reserva 2009

OTROS TINTOS VARIETALES:
El que más me gustó: Lagarde Guarda Cabernet Franc 2009
El más raro o diferente: Familia Cecchin Nebbiolo 2002 - Huzep Cordisco 2011
El de mejor RPC: Viniterra Carmenere 2008
El gran clásico: Cicchitti Sangiovese 2011

OTROS TINTOS DE CORTE HASTA $100:
El que más me gustó: Patriarca Malbec-Cabernet Sauvignon 2007
El más raro o diferente: Ultramar Gran Reserva 2008
El de mejor RPC: Familia Tipo Tinto 2011 - Viñedos Altamira Valley Blend 2011
El gran clásico: Don Tiburcio Blend 2007

OTROS TINTOS DE CORTE DE MÁS DE $100:
El que más me gustó: DV Catena Cabernet-Malbec 2006
El más raro o diferente: Finca La Anita Blend de Cosechas Malbec-Merlot S/A
El de mejor RPC: Arnaldo B. Gran Rsva. 2008 - Atilio Avena G.R. Barlet III 2007
El gran clásico: Cavas de Weinert 2004

ESPUMOSOS:
El que más me gustó: Rosell Boher Brut Méthode Champenoise NV
El más raro o diferente: Ventania Extra Brut NV
El de mejor RPC: Cruzat Cuvér Reserve Brut Nature NV
El gran clásico: Norton Cosecha Especial Extra Brut NV

DULCES Y ESPECIALES:
El que más me gustó: Cinco Sentidos Malbec Late Harvest 2008
El más raro o diferente: García Riccardi Vino Casero Tinto de Invierno 2009
El de mejor RPC: Dilema Dulce Natural 2012
El gran clásico: Ciclos Tardío Torrontés 2009

En estos 85 vinos he recorrido un año muy interesante para mí desde el punto de vista enológico. Si tienen ganas, los invito a comentar cuales fueron las novedades que más disfrutaron ustedes en este año 2012. ¡Hasta la próxima copa!

Si quieren ver mis elegidos del año anterior:
Balance Enológico del 2011 

sábado, 22 de diciembre de 2012

BURBUJAS DIFERENTES PARA LOS BRINDIS QUE SE VIENEN


“Mientras que vinos espumosos vierte, nuestra antigua amistad, en este día, y con alegres brindis se divierte; y en raudales se escapa la armonía; y la insaciable gula se despierta; y va de flor en flor la poesía” (Ignacio Ramírez, poeta mexicano).

Llegan las fiestas de fin de año y es inevitable hablar de vinos espumosos. No cabe ninguna duda que las centelleantes burbujas son siempre sinónimo de celebración y alegría… ¿verdad?

Cada vez que los amigos se juntan, la familia se reúne o la pareja se encuentra, los cristales se chocan, los “chin-chin” se repiten y el brindis no tarda en aparecer, prodigando bendiciones y buenos deseos para todos.

Argentina es un destacado productor y consumidor de estos vinos, siendo el más importante de Latinoamérica. Existen en nuestro país una decena de marcas de larga tradición y merecido prestigio en la elaboración de estos productos, que no requieren ni siquiera mención pues son casi sinónimos de la categoría (Chandon, Baron B, Mumm, Navarro Correas, Nieto Senetiner, Norton, Toso, Federico de Alvear, Rosell Boher, etc.).

Sin embargo, en esta última nota del año quiero hablarles sobre algunas “burbujas diferentes” (diferentes por su método de elaboración, por los cepajes utilizados, por su estilo o por su origen) pues estas “abren el espectro” de opciones para los bebedores inquietos. Si se animan a un brindis realmente distinto, aquí ocho vinos peculiares que vale la pena probar:    

Santa Florentina Brut de Torrontés ($38): Este espumoso existe hace años -y se despacha en grandes cantidades al extranjero-, pero pasa casi desapercibido para la generalidad de los consumidores locales. Un producto sumamente original y de calidad destacada, elaborado por la Cooperativa La Riojana (uno de los mayores productores y exportadores nacionales, que trabaja con más de 700 pequeños viticultores de la provincia). Está vinificado por el método charmat con uvas torrontés riojanas, dando como resultado un vino efervescente muy fresco y de indudable tipicidad varietal (uvas frescas, pétalos de rosas, cítricos). En la boca es sencillo y efectivo, con acidez adecuada y las burbujas justas. ¿Qué más se le puede pedir a este espumoso verdaderamente único y de precio tan acomodado?  

Trapiche Demi Sec ($56): Los espumosos semi-dulces no tienen “buena prensa” en nuestro país, quizás porqué históricamente fueron productos que nunca se destacaron por su calidad. No obstante, cuando uno prueba un demi-sec bien elaborado -como este de Trapiche-, descubre una  bebida muy versátil para disfrutar en diferentes ocasiones. Este vino efervescente tiene aromas y sabores frescos y frutados, suave dulzor -bien balanceado por la acidez- y burbujas medianas. ¡Sirve muy bien como aperitivo, o incluso para acompañar alguna comida veraniega liviana!   

Lorca Fantasía Extra Brut ($60): Otro producto quizás poco conocido, pero que hace las delicias de quienes lo descubren por primera vez. Un “blanc de blancs” -espumoso elaborado exclusivamente con uvas blancas, en este caso chardonnay y chenin-,  bien juvenil y refrescante. Su nariz exhibe aromas de frutas blancas maduras, con suaves toques herbáceos y de levadura; en la boca es liviano, de burbujas medianas y delicada acidez, con una grata permanencia ¡Un espumoso para comprar de a cajas, pues tiene un costo muy lógico por su calidad!

Las Perdices Sweety ($65): Si los brindis de fin de año vienen por el lado de los vinos dulces, aquí hay un producto que no puede faltar en la mesa. Un espumoso moderno y “entrador”, elaborado con un corte de uvas torrontés, viognier y sauvignon blanc. De aromática seductora (uvas frescas, cítricos y pinceladas herbales); tiene una boca muy golosa pero que no empalaga gracias a un pequeño amargor final -tan propio de la uva torrontés- que balancea el conjunto. ¡Una simpática novedad, para cerrar el año con dulzura!

Ventania Extra Brut ($80): ¿Quién hubiera pensado hace un par de años en un vino espumoso elaborado en Buenos Aires? Quizás nadie hasta que la bodega Saldungaray lo hizo posible, logrando un producto muy interesante. Un vino burbujeante elaborado por método tradicional, con uvas chardonnay y pinot noir cosechadas en la región bonaerense de Sierra de la Ventana. El resultado es una bebida de buena complejidad aromática -apoyada principalmente en las notas de frutos secos (nueces, avellanas), con algunos trazos frutales frescos (manzana, pera)-. Al llevarlo a la boca es simple, con la acidez justa y una persistencia agradable pero algo breve. Quizás el valor de mercado sea algo elevado, pero creo que vale la pena “bancar” a las regiones emergentes, pues ellas “amplían el abanico de posibilidades” para los enófilos. ¿No les parece?

Vicentín Rosado de Malbec Brut 2010 ($87): Este espumoso aún no ha llegado a Córdoba, pero creo que “dará que hablar” por su acertada relación calidad-precio. Esta elaborado con uvas malbec por el método tradicional, lo que le aporta notable complejidad y estructura -algo poco frecuente en este segmento de precios-. Es un rosado con elegante nariz de frutas ácidas, panadería (masa de pan fermentando, brioche) y suaves dejos a frutos secos (almendras tostadas). En la boca tiene paso amable, agradable acidez, burbuja fina y moderada persistencia. ¡Apenas lo veas comprate alguna botella, no te va a decepcionar!   

Jairalla Oller Extra Brut ($100): No podía faltar un crédito local en esta lista -pues uno tiene su corazoncito cordobés, ¿vio?-, con una primicia absoluta que llega desde Ischilín (en el Noroeste provincial). Un espumoso elaborado pacientemente por Héctor Jairala con uvas chardonnay de su propia finca, utilizando el método tradicional. Esta primera experiencia -de apenas 2000 botellas- ofrece un bello color dorado, sumado a una sugerente nariz de frutas blancas, toques herbáceos y algo de levadura. En la boca es suave, con burbujas delicadas y acidez refrescante ¡Un producto de notable factura, para empezar a soñar con que Córdoba juegue “en la primera división” de la vitivinicultura argentina!

Alma 4 Viognier 2009 ($107): Los productos de Alma 4 son un proyecto “de rebeldía” de cuatro jóvenes mendocinos -entre ellos Sebastián Zuccardi-, que lleva casi una década de vida. Apenas egresados de la Facultad, estos nóveles enólogos e ingenieros agrónomos decidieron largarse a elaborar espumosos como les habían enseñado “que no se podían hacer” (así empezaron a experimentar con uvas tintas, con cepas no tradicionales, con vinos pasados por madera, largas crianzas sobre lías, etc.). Los resultados obtenidos fueron muy originales, como este espumoso elaborado con uvas viognier por el método tradicional –y casi 20 meses sobre borras-.  A la vista se presenta de un amarillo pajizo pálido, con perlage mediano y elegante. Su aroma ofrece notas florales, de caramelos de miel y confitura de peras -combinados con suaves trazos de crianza sobre lías-. Su sabor es fresco, de entrada amable pero paso de boca seco. Acidez algo marcada -sin llegar a molestar-; cuerpo medio y buen balance general ¡Estoy seguro que este te va a sorprender!  

Si quieren más propuestas originales, pueden re-leer la nota: Burbujas no tradicionales.

¡Deseo que en estas fiestas no falten en vuestras copas raudales de chispeantes burbujas! ¡Feliz Navidad y un Buen Año 2013 para todos! 

**Esta nota fue publicada originalmente en la web cordobesa de Circuito Gastronómico**

lunes, 17 de diciembre de 2012

VINOS PARA AGASAJAR y AGASAJARSE



“Ofrecer vino es un gesto de hospitalidad encantador; una muestra de cultura y buen gusto” (María Isabel Mijares y García Pelayo, enóloga española)

Llegan las festividades de fin de año, es momento de encuentros y reuniones. En estos eventos no puede faltar una botella de buen vino para prestigiar la mesa, obsequiar a los invitados y/o para ser indulgentes con nosotros mismos... ¿por qué no?

Una comida sabrosa se realza con una botella destacada, así que hay que “tener siempre a mano” algunos ricos vinos para los festejos que nos esperan. Como en esta época estamos celebrando, quizás podemos gastar un poco más en productos de alta calidad.

De todos los vinos notables que he tenido la suerte de probar en estos últimos meses, estos son mis seis elegidos para agasajar(se):

Félix Torrontés 2011 ($80): Nuestra autóctona uva torrontés suele despertar amores u odios entre los consumidores; debido a la personalidad impetuosa y arrolladora de sus aromas/sabores. Para quienes disfrutan de los productos elaborados con este cepaje, aquí hay un torrontés “con todas las letras”. Un blanco de aromas inconfundibles (uvas frescas, cítricos, azahar, rosas secas), con una boca voluminosa, plena de sabor, con buena acidez y larga persistencia -sostenida por un amarguito final apenas perceptible-. Lo que se dice “un vino de libro”, que bien vale cada peso que se paga por él. ¡Ideal para acompañar sushi o comida oriental de intensa sazón! 

Rutini Sauvignon Blanc 2011 ($95): Este es el blanco más elegante de la variedad que he podido probar en nuestro país. Un sauvignon blanc de excelente tipicidad, pero sin excesos “vegetales”. Todo en este vino es delicadeza, equilibrio y balance. Un producto de exquisita nariz tropical (pomelo blanco, piña) y levemente herbácea (pasto cortado); con una boca bien fluida, sabrosa, sumamente refrescante y de larga persistencia. Un vino ideal para acompañar un surtido de sushi de calidad. ¡El precio es alto, pero vale la pena probarlo alguna vez! Los gustos hay que dárselos en vida… ¿no?

Don Nicanor Bonarda 2010 ($86): La bodega Nieto Senetiner fue una de las pioneras en revalorizar este olvidado cepaje, elaborando producto de calidad destacada. Este vino es una de sus últimas novedades de la empresa, dentro de su línea emblemática. Un tinto de bello y profundo color violáceo; en la nariz se perciben aromas de frutas acidas y toques herbáceos, con el uso de la madera en un segundo plano. La boca tiene entrada amable pero seca, volumen medio, acidez moderada y taninos apenas presentes, redondeando una persistencia moderada. ¡Rico vino para “quedar de lujo” en el asado con amigos, sin gastar demasiado! 

Lagarde Guarda Cabernet Franc 2009 ($115): Lagarde es una tradicional bodega mendocina, cuyos productos mantienen un estilo bastante clásico. Dentro de su gama intermedia, este es mi vino favorito. Un Cabernet Franc de intenso y bonito color rojizo-violáceo, límpido y brillante. En la nariz destaca la profundidad y complejidad de sus aromas; que se mueven entre lo  balsámico (mentolado, regaliz), lo herbáceo y lo frutal maduro (ciruelas). En la boca el vino es voluminoso e intenso; con entrada amable, plenitud de sabores y taninos nobles aún algo presentes -pero que no molestan para nada-, cerrando una persistencia larga. ¡Para compartir con el amigo del alma!

Bramare Marchiori Vineyard Cabernet Sauvignon 2008 ($350). Qué puedo decir de este vino increíble, inmenso representante del cepaje, elaborado con uvas de uno de los viñedos más antiguos y reputados de Mendoza (en el corazón de Agrelo, Lujan de Cuyo). Es un tinto de aromas seductores y extremadamente complejos (frutas maduras, especias dulces, pimienta, tabaco, regaliz, cuero); soportado por una boca madura y muy sabrosa, de taninos firmes pero delicados, acidez calibrada a la perfección y larguísima persistencia Verdaderamente un vino “world class”, que debido a su éxito mundial está a un precio bastante elevado en el mercado local. ¡Excelente vino, para descorchar en una ocasión realmente especial!   

Laborum Torrontés de Otoño 2010 ($90): No hay dudas que nuestra emblemática uva blanca nacional es excelente para elaborar vinos de cosecha tardía, como lo demuestra este notable producto de la bodega salteña El Porvenir de Cafayate. Un blanco dulce elaborado con uvas torrontés sobre-maduradas por el intenso y vehemente sol de los Valles Calchaquíes, que luego ha sido añejado por algunos meses en barricas de roble para terminar de perfilar un vino excepcional y complejo. Al llevarlo a la nariz explotan los aromas de uvas frescas, uvas pasas, miel, canela, vainilla y pétalos de rosas secas; para luego en la boca comportarse pleno, voluminoso, muy goloso -pero sin empalagar, gracias a su alcohol elevado y a un leve amarguito final-, dejando el paladar tapizado de suaves notas frutales maduras. ¡Un digno colofón para una gran comida, acompañado los postres o la sobremesa! 

Cruzat Cuveé Reserve Nature ($90): Un espumoso de gran calidad, para los brindis formales que se avecinan. Está vinificado por Don Pedro Rosell, gran enólogo argentino y notable especialista en este tipo de productos. Un vino burbujeante elaborado por el método tradicional -segunda fermentación en botellas- con 36 meses de crianza sobre lías, lo que le aporta una gran complejidad y finura. En la nariz predominan los aromas de crianza (levadura fresca, pan crudo, frutos secos), con algunos trazos frutales leves (manzana, pera). En la boca es todo garbo y delicadeza, con una sensación cremosa muy delicada -debida a sus finas burbujas-, refrescante acidez y notable persistencia. Creo que es un espumoso que está excelente en su relación calidad-precio, incluso muy superior en calidad a varios productos de marcas más conocidas. ¡Háganme caso, pruébenlo y después me cuentan!

¿Me contarían con que vinos “se miman” ustedes? ¡Hasta la próxima copa!

**Esta nota fue publicada originalmente en la web cordobesa de Circuito Gastronómico**

martes, 11 de diciembre de 2012

QUINTA LUPA BLOGUERA: ESPUMOSOS

PRESENTACIÓN:

Por quinta vez consecutiva en lo que va del año 2012, el grupo de los Blogueros del Vino nos ponemos de acuerdo para realizar una nueva actividad en común. En esta oportunidad, volvemos a realizar una “Lupa Bloguera”.



Para quienes no nos siguen con frecuencia, aquí, aquí, aquí y aquí pueden leer sobre las experiencias anteriores, así como sobre el funcionamiento de esta actividad conjunta.



En esta nueva experiencia grupal, la elección recayó sobre los vinos espumosos (elección casi obvia, sabiendo la época del año que estamos transitando) y el rango de precios se dejó a criterio de cada bloguero. La idea fue nuevamente “barrer la góndola”, para que los lectores puedan encontrar diferentes opciones en la categoría elegida.  


LOS VINOS ESPUMOSOS:


Se denomina vinos espumosos a todos aquellos productos que tienen gas carbónico disuelto en su interior (burbujas). Este gas carbónico endógeno puede haberse obtenido de manera natural -por un proceso de doble fermentación -en la primera se elabora un vino tranquilo y en la segunda se gasifica- o puede incorporarse de manera artificial.

En este primer caso, existen varios métodos de gasificación natural como Champenoise o Tradicional (toma de espuma en botellas), Charmat o Chausspied (toma de espuma en tanques), Transfer o Transversage (una combinación de los dos anteriores, poco utilizado en nuestro medio) y Rural o Ancestral (antigua técnica donde fermentación y toma de espuma se realizan en un sólo paso en un recipiente cerrado).

Todos los grandes espumosos de calidad del mundo se realizan de manera natural, con el método champenoise como imperativo en las denominaciones de origen Champagne (Francia), Cava (España), Sekt (Alemania), Spumante y Franciacorta (Italia).

En el caso de los espumosos gasificados de manera artificial -los comúnmente llamados frizzantes-, suelen ser productos más simples, dulzones y de segmentos de precio más bajo. No tienen gran atracción para los enófilos, pero suelen ser la “puerta de entrada” al consumo de vinos entre los jóvenes.

Argentina es hoy un destacado productor y consumidor de vinos espumosos, siendo el más importante de Latinoamérica. Las estadísticas oficiales indican que en nuestro país se elaboran aproximadamente 30.000.000 de litros anuales (INV 2010), representando el consumo interno más del 90% de esa cantidad.

El grueso de la producción local se concentra en seis grandes compañías que -con una docena de marcas- dominan el mercado; dejando apenas un pequeño segmento para los elaboradores más pequeños (en donde -sin embargo- puede hallarse productos muy interesantes y diferenciales, como el que se eligió para esta nota).  


EL RANGO DE PRECIOS:

He elegido para esta Lupa Bloguera un espumoso de $107 pesos. Sé que es un segmento bastante alto, pero creo que entre los $90 y $150 están las mejores burbujas nacionales (y las de mejor RPC).


VAMOS AL VINO ELEGIDO:


ALMA 4 VIOGNIER 2009 ($107)

Los productos de la bodega Alma 4 son un proyecto “de rebeldía” de cuatro jóvenes mendocinos -entre ellos Sebastián Zuccardi-, que lleva casi una década de vida.

Apenas egresados de la Facultad, estos nóveles enólogos e ingenieros agrónomos decidieron largarse a elaborar espumosos como les habían enseñado “que no se podían hacer” (así empezaron a experimentar con uvas tintas, con cepas no tradicionales, con vinos pasados por madera, largas crianzas sobre lías, etc.).

Los resultados obtenidos son muy originales, como este espumoso elaborado con uvas viognier por el método tradicional -con 20 meses sobre borras-.

Vista: Límpido y brillante. Amarillo pajizo pálido. Perlage mediano y elegante.

Aroma: Agradable y de complejidad media. Notas florales, caramelos de miel y confitura de manzanas o peras. Delicados aromas de crianza sobre lías (levadura fresca).

Gusto: Bien fresco, de entrada amable pero paso por boca seco. Acidez algo marcada -sin llegar a molestar-. Cuerpo medio y burbujas moderadas. Buen balance general.  

Impresión global: Un espumoso de buena calidad, en un precio quizás algo elevado (RPC Regular a Correcta). Creo que vale la pena por la rareza, aunque en ese valor hay otros espumosos de calidad igual o superiores.

De esta línea “Alma 4” me parecen más atractivos el Bonarda y el Pinot-Chardonnay.


OTROS BLOGS QUE PARTICIPAN

Si quieren leer sobre otros vinos elegidos para “La Lupa Bloguera”, no dejen de visitar los blogs de los colegas participantes de esta actividad:

-          El Vino del Mes
-          Fabián Mitidieri
-          Mr. Wines
-          Rumbovino
-          Vinarquia
-          Vinos en Buenos Aires
-          Wine Mdq

lunes, 3 de diciembre de 2012

VINOS PARA COMPRAR INTELIGENTEMENTE


“Un vino es perfecto cuando uno lamenta haber acabado la botella” (Roberto Verino, diseñador gallego)

Hace algunas semanas publiqué aquí una nota sobre buenos vinos a precios accesibles (Vino con poca plata), que tuvo bastante repercusión. Hoy quiero presentarles algunos vinos que quizás no son tan baratos como aquellos, pero que satisfacen mucho por el precio que se los paga.

Estos vinos son comúnmente llamadas “best buys” (buenas compras), pues justifican con su calidad -u originalidad- el valor de mercado que se paga por ellos. Suelen ser los vinos que más satisfacciones nos generan a los enófilos, pues nos hacen sentir que hemos “gastado bien nuestro dinero”.

Dentro de la inmensa producción nacional hay decenas de ejemplos de estos productos; que sólo deben buscarse con algo de paciencia. Para ayudar en esta exploración, aquí ocho recomendados de buena relación precio-calidad:

Hagmann Moscato S/A ($26): Nada mejor que revisitar los clásicos de vez en cuando. Este producto es ideal para ello, pues pertenece a una de las pocas bodegas nacionales que continúan con la tradición de los vinos especiales (licorosos). Un buen Moscato sanjuanino, perfumado y moderadamente dulce. Ideal para acompañar pizza (arraigado maridaje argentino -algo caído en desuso en la actualidad-, pero que personalmente homenajeo cada vez que ando por alguna pizzería de Buenos Aires). Un vino que debe beberse bien frío, para balancear su dulzor y potenciar su frescura. ¡Una delicia, que quieren que les diga!

Aguma Sauvignon Blanc 2012 ($30): Esta joven bodega sanjuanina se especializa en hacer buenos productos a precios razonables. De toda su línea clásica, este es el vino que más me gusta. Un blanco aromático y fresco, con una buena tipicidad varietal que se traduce en una nariz limpia de aromas frutales (ananá, cítricos) y herbáceos (pasto cortado, ruda). La boca es liviana, sabrosa y de acidez marcada, invitando a tomar más de una copa. ¡Gran vino para disfrutar de una tarde de calor a la orilla del río!     

Don Coco Isabella Blanca 2012 ($35): Esta sí que es una “perlita” para buscadores de rarezas -de la cual además se han hecho apenas 300 botellas, así que habrá que ser “rápido de reflejos” para conseguir una-. Un vino sumamente particular, elaborado con un extraño clon albino de nuestra uva regional -del que hay plantadas apenas unas pocas hileras en una finca de Colonia Caroya-. Este blanco tiene los aromas frutales frescos inconfundibles de la cepa, pero que viran un poco hacia el ananá maduro, la miel y los duraznos en almíbar. En la boca es ligero, bastante goloso pero balanceado con una  buena acidez; lo que lo vuelve un producto muy sencillo de beber. ¡Quizás tenga que manejar hasta la Colonia el fin de semana para buscar algunas botellas, pero por la singularidad y el precio razonable realmente vale la pena!

Santa Julia Reserva Tempranillo 2010 ($39): ¿Quién no conoce esta marca de vinos de bodega Familia Zuccardi? Pues bien, dentro de la línea este es -sin dudas- su mejor producto. Un tempranillo muy atractivo de beber, con el perfil definido de la variedad. La nariz es frutal madura (ciruelas ácidas, moras) y algo especiada, con algunos trazos de complejidad aportados por el contacto con roble. En boca es un vino sabroso y franco; con entrada seca, volumen medio, taninos apenas presentes y buena persistencia. Un vino “que se le para de igual a igual” a varios productos aún de mayor gama. ¡Una excelente compra, como para tener siempre algunas botellas en casa!

Don Manuel Villafañe Cabernet Franc 2011 ($48): Para quienes no conocen aún este  cepaje -de la misma familia del Cabernet Sauvignon-, este producto puede ser la excusa perfecta para descubrirlo sin gastar demasiado. Un tinto muy bebible, que muestra con sutileza la tipicidad de esta uva. Al llevarlo a la nariz es un vino de aromática frutal fresca, con algunas reminiscencias herbales y balsámicas (eucaliptus, anís, mentol). En la boca tiene una entrada amable y refrescante, de sabor frutado, con taninos moderados y mediana persistencia ¡Buen vino para acompañar pastas con salsa carbonara o filetto!

CarinaE Cuvée Brigitte 2009 ($58): Esta tinto pertenece a la pequeña bodega familiar de Brigitte y Philippe Subra (un matrimonio francés afincado en Argentina desde fines de los años 90´). Un corte de uvas malbec y cabernet sauvignon, apenas “tocado” por el roble para no robarle frescura. Un vino de nariz sumamente especiada (pimienta, clavo) balsámica y con algo de frutos negros -bien típica de cabernet-, en perfecta conjunción con algunas suaves notas florales -típicas del malbec-. Al llevarlo a la boca es un vino de entrada seca -que se suaviza en el medio de boca gracias a la golosidad frutal del malbec-, con buen volumen, taninos firmes -pero no secantes- y sugestiva persistencia. ¡Un rico vino, que te “deja bien parado” en un asado sin “hacerte temblar la billetera”!  

Grandelirio Malbec 2011 ($65): Este vino es una novedad absoluta en el mercado cordobés. Una apuesta fuerte del joven enólogo mendocino Eduardo Olivera Scotti, que decidió dejar la seguridad de trabajar en una gran bodega para largarse a la aventura de tener -junto a su familia- un vino propio. ¡Visto los primeros resultados plasmados en esta botella, parece que la decisión fue muy acertada y tenemos buenos vinos para rato! Este tinto es un típico malbec mendocino, que se bebe con facilidad y deleite. Nariz de frutas maduras y trazos especiados (brindados por el breve contacto con roble); que se complementa con una boca de entrada muy amable, sabor frutal fresco, agradable fluidez -gracias a sus  taninos redondos y dulces- y persistencia sostenida. El packaging es original, moderno y atractivo, lo que le suma algunos puntos extra. ¡Un producto para sorprender a los amigos, en un precio sumamente razonable!    

Huzep Extra Brut ($52): Este vino espumoso es un verdadero “tapado”, pues ofrece mucho más de lo que su precio pide. Vale la pena descubrirlo ahora que se acercan las fiestas de fin de año, pues es una gran elección para la mesa navideña. Este producto está elaborado por Don Juan Graffigna Del Bono (quizás el último de los patriarcas de la vitivinicultura sanjuanina, descendiente de una familia muy arraigada en la industria del vino cuyana); utilizando el método charmat, sobre la base de un corte de uvas blancas chardonnay y sauvignon blanc. El resultado es un vino burbujeante sumamente liviano y vivaz; sus aromas son frutales (manzana verde, pera, ananá maduro) y algo herbáceos, dando paso luego a una boca ágil, muy refrescante y de fino “perlage”. ¡Para descubrir y sorprenderse!

¿Y ustedes, que vinos que compran con frecuencia? Cuéntenos si quieren cuáles son sus recomendados en relación precio-calidad. ¡Hasta la próxima copa!

**Esta nota fue publicada originalmente en la web cordobesa de Circuito Gastronómico**

sábado, 17 de noviembre de 2012

VINO DE DONDE NO ESPERABAS


"El Vino es el maestro del gusto. Nos ayuda a cuidar nuestro interior, libera el espíritu e ilumina la inteligencia” Paul Claudel (Poeta francés -1868-1955)

A través de los siglos, los diferentes cepajes vitivinícolas siempre han estado ligados a su terruño de origen. Así el Malbec siempre fue de Cahors, el Tannat del Madiran, la Syrah de la Côtes du Rhône y la Sauvignon Blanc del Val de Loire (todos en Francia). Esta asociación tan estrecha se debía a largos siglos de adaptación a ese clima y suelo.

Con el descubrimiento y colonización del Nuevo Mundo en la Edad Moderna, las uvas fueron llevadas allí y naturalmente buscaron zonas geográficas de climatología similar, donde se desarrollaron en plenitud. El Malbec se adaptó de maravillas a la región mendocina de Lujan de Cuyo, el tannat se instaló en las templadas regiones de Uruguay  -y en nuestro noroeste-, el syrah se hizo famoso en Australia -pero también en San Juan- y el sauvignon blanc prefirió los climas fríos y se fue a Nueva Zelanda o Chile -y a las zonas frescas de Mendoza y la Patagonia-.

Hasta aquí todo seguía una lógica biológica -valga el juego de palabras-. Sin embargo, con el trabajo esforzado de ingenieros agrónomos y enólogos de todo el mundo, se pudo “torcer el destino” y adaptar variedades vitícolas a zonas impensadas apenas algunas décadas atrás. Estas experiencias tuvieron sus altibajos, pero permitieron experimentar y descubrir algunos vinos diferentes.

Si les tienta la idea de disfrutar algunos productos que pertenezcan a esta categoría de “vinos de donde no esperabas”, aquí van seis interesantes propuestas:

Andeluna Torrontés 2011 ($45): Hasta hace algunos años, decir torrontés era decir Salta. Sin embargo, hoy vemos como esta uva a llegado a Mendoza para quedarse. Este blanco es el que más me gusta de los torronteses cuyanos. Es un producto de una frescura increible, con notas florales y cítricas que estallan en la copa embelesando la nariz. Al llevarlo a la boca, entra apenas goloso, para dar paso luego a un vino ágil, de buen cuerpo y moderada persistencia (sin el amargor típico de los vinos cafayateños). ¡Lo probé varias veces y me parece un producto excelente a un precio muy competitivo!

Gérôme Marteau Torrontés 2011 ($45) : El torrontés no se ha conformado con llegar a Mendoza, si no que ha seguido migrando hasta la misma Patagonia. De alli proviene este blanco fragante y vivaz ; con una seductora nariz de frutas frescas y trazas vegetales muy agradables. En la boca es apenas amable, pleno de sabores, cuerpo medio y persistencia correcta para el rango ¡Un vino algo dificil de conseguir -pues no está en muchos comercios, ya que la familia elaboradora prefiere hacer una distribución personalizada-, pero que vale la pena tomarse la molestia de buscarlo!    

RD Sauvignon Blanc 2011 ($80): Tuve la suerte -y la sorpresa- de probar este vino en la feria Vinos de Altura hace algunas semanas. Si no me hubieran dicho previamente que provenía de Tacuil (en Salta, a más de 2600 m.s.n.m.), no me lo hubiese creido. Realmente es un blanco que respeta la tipicidad de la uva, a pesar de estar cultivado en una región donde lo último que esperaría uno encontrar es un sauvignon blanc. Al degustarlo aparece un vino fresco, de nítidos aromas minerales, herbáceos y algo frutales -pero sin excesos que a veces parecen artificiales-. En boca es ligero y de acidez amable, invitando a tomar más de una copa. ¡Una rareza que merece ser probada !

Verum Cabernet Franc Reserva 2010 ($95): La cabernet franc es una antigua cepa de origen francés, que tiene aún escasa difusión en nuestro país. La pequeña producción siempre se uso para cortes; recién en el último lustro aparecieron algunos ejemplares como varietal puro. En la Patagonia hay muy pocos ejemplares, y creo yo que este es el mejor en la actualidad. Un tinto de buena potencia pero notable elegancia. La nariz tiene notas de frutas maduras y toques herbáceos muy frescos, enmarcados en suaves notas dulces de la crianza en barricas (cacao, vainilla). En la boca es amable, sabroso, frutal y con la frescura natural de los vinos de zonas frías, convirtiéndolo en un producto de trago muy amable. ¡Me gusta mucho para acompañar un cordero asado, en despedida de año con amigos!   

Fin Tannat 2007 ($135): ¿Quién hubiera pensado degustar un tannat de la Patagonia? Pues la Bodega del Fin del Mundo lo ha hecho posible, a través de su línea de “single vineyards”. De una pequeña parcela experimental -y con un rendimiento muy acotado, que no superó los 5100 kg- se elaboró este vino particular. Al degustarlo a ciegas cuesta decir que es un tannat (seguramente por que tenemos en la cabeza el estilo de los vinos del norte, terrosos y empireumáticos), pero el producto está muy bien. Tiene aromas frutados, balsámicos –anís, regaliz- y algunas notas de buen roble; que dan paso a una boca voluminosa, de entrada seca e intensa, con taninos recios y persistencia media. Vale la experiencia de probar un vino diferente, aunque me parece que el precio del producto quizá sea demasiado elevado.

El Esteco Extra Brut NV ($65): Cuando uno habla de espumosos, siempre se vienen a la mente regiones frías (la Champagne francesa, el Penedés catalán, el norte de Italia, quizás Mendoza o Río Negro). Sin embargo -desde hace ya un par de años- hay que agregar a Salta a esta lista. La tradicional bodega El Esteco (perteneciente al Grupo Peñaflor) elabora este espumoso seco de notable calidad, en base a un corte de uvas chardonnay, torrontés y un pequeño porcentaje de malbec. El producto en cuestión está muy bien. Sus aromas son frutales -manzana y ananá- con algunos toques de levadura; al llevarlo a la boca entra bien seco, generoso en sabor, con buenas burbujas, fresca acidez y notable persistencia. ¡Si no me equivoco, las mejores burbujas del Noroeste!

¿Han probado ustedes algún otro vino de donde no esperaban? Son bienvenidos los comentarios, para seguir descubriendo “perlitas” enológicas...

**Esta nota fue publicada originalmente en la web cordobesa de Circuito Gastronómico**

martes, 13 de noviembre de 2012

CUARTA LUPA BLOGUERA: TEMPRANILLO

Por cuarta vez consecutiva, el grupo de los Blogueros del Vino nos ponemos de acuerdo para realizar una nueva actividad en común. En esta oportunidad, volvemos a realizar una “Lupa Bloguera”.



Para quienes no nos siguen con frecuencia, aquí, aquí y aquí pueden leer sobre las experiencias anteriores, así como sobre el funcionamiento de esta actividad conjunta.



En esta nueva experiencia grupal, la cepa elegida fue la Tempranillo y el rango de precios se dejó a criterio de cada bloguero. La idea fue nuevamente “barrer la góndola”, para que nuestros lectores puedan encontrar  diferentes opciones en la categoría elegida.  

LA TEMPRANILLO:

www.vinoquedadores.es

La uva Tempranillo es una cepa tinta originaria del norte de España, donde forma parte esencial de la mayoría de sus grandes vinos. Es la uva más importante en las DOCa Rioja, DO Ribera del Duero y DO Toro. También se la utiliza en proporciones menores en otras regiones como Navarra, La Mancha, Madrid, Aragón, Cataluña y Galicia.

Se considera la uva emblemática española, siendo la segunda en superficie implantada (luego de la Garnacha Tinta). A lo largo de la Península Ibérica recibe otros nombres como: Tinta Fina, Tinta País, Tinta de Toro, Cencibel, Ull de Llebre, Araúxa, Tinta Roriz y Aragonêz (estas últimas dos sinonimias típicas de Portugal)



Viñedo en la DO Toro (fotografía propia) 

Se la cultiva en varias regiones del Nuevo Mundo (EEUU, Australia, Chile, Perú, México y Argentina), pero en ninguna alcanza el nivel de importancia que tiene en su región de origen. Sin embargo, en esta última década la variedad está experimentado un “resurgimiento” gracias a los desarrollos producidos en California y Argentina.

Tiene una moderada difusión en nuestro país, donde hay unas 6568 hectáreas (INV, 2009). Es la sexta uva tinta más plantada y representa el 6,3% del viñedo tinto nacional. La mayor parte de esta superficie se encuentra implantada en la provincia de Mendoza.  Es una uva de maduración bastante temprana (de allí su nombre) y prefiere los climas templados y con buena amplitud térmica.

No está muy claro como llego esta uva al país, pero no es descabellado pensar que esté en nuestro encepado vernáculo desde la Época Colonial (llegado con los conquistadores y sacerdotes españoles). Seguramente hubieron nuevas introducciones de cepas con las oleadas migratorias europeas del siglo XIX, así que es pienso que es un varietal de larga data en nuestro territorio.

He probado buenos vinos de esta variedad (algunos muy destacados para exportación), pero creo que aún le falta desarrollo. De todas maneras, creo que es un cepaje para observar muy de cerca…

EL RANGO DE PRECIOS:

He elegido para esta lupa un vino de $75 pesos argentinos. Sé que es un segmento moderadamente alto, aunque aún bastante accesible para los enófilos que disfrutan de los buenos vinos.  

VAMOS AL VINO ELEGIDO:

 www.pueyrredonbebidas.com.ar

Fond de Cave Reserva TemprAnillo 2005 ($75):

Vista: Límpido y brillante. Bello color rojizo, con menisco apenas virando hacia el teja.

Aroma: Sumamente agradable y de buena complejidad. Las notas de la fermentación maloláctica (mantequilla) y de la crianza en barricas (vainilla, caramelo) se notan aún, a pesar de la edad. Al darle tiempo en copa aparecen aromas de frutas confitadas, más algunos trazos terrosos y minerales.

Gusto: Entrada agradable y bien seca (a pesar de lo “golosa” que estaba la nariz). Buen medio de boca, sabroso y con la acidez correctamente balanceada. Persistencia media-larga.

Impresión global: Un vino de muy buena calidad, en un precio medio-alto. Presenta una agradable evolución, dentro del estilo de los productos que más me agradan. A pesar de tener ya siete años, es la añada vigente en el mercado. 

RPC: Buena a Muy Buena.
Puntaje: 84/85 pts. ¡Lo volvería a comprar, pues me gustó!
Link de la bodega: http://www.trapiche.com.ar

OTROS BLOGS QUE PARTICIPAN

Si quieren leer sobre otros vinos elegidos para “La Lupa Bloguera”, no dejen de visitar los blogs de los colegas participantes de esta actividad:

-          El Vino del Mes
-          Fabián Mitidieri
-          Mr. Wines
-          Rumbovino
-          Vinarquia
-          Vinos en Buenos Aires
-          Wine Mdq