sábado, 20 de abril de 2013

LOS VINOS NATURALES

Viñedo de Cabernet Sauvignon en Noble de San Javier (Traslasierra)

"El mejor vino es aquel que nos deleita con su calidad natural" (De Re Rustica, Lucio Moderato Columela, siglo I d.C.)

Los vinos naturales (“crudos” o “desnudos”, como los mencionan otros autores) son aquellos que se vinifican con la mínima intervención humana en el proceso, evitando al máximo los tratamientos físicos innecesarios y el uso de aditivos químicos durante la elaboración. Son productos que reflejan fielmente lo que la uva -y el medio donde esta crece- pueden brindar, actuando allí el enólogo como un mero “guía” de los procesos biológicos que se suceden durante la conversión del mosto en vino.

Son productos bastante diferentes a los vinos que estamos acostumbrados a tomar -que generalmente han sido “trabajados” para obtener un perfil sensorial determinado-; y suelen parecer organolépticamente “pobres” y “simplones” a quienes los prueban por primera vez. Sin embargo, a medida que se los descubre y degusta con atención, se empiezan a descubrir las pequeñas sutilezas que marca el terruño.

Están actualmente muy en boga tanto en Europa como en los Estados Unidos, aunque personalmente me gustaría que esto no fuera sólo una moda si no una tendencia general hacia una elaboración menos invasiva y más respetuosa con la naturaleza.

Un último consejo: Estos vinos no son ni mejores ni peores que los “industrializados”, simplemente son más genuinos y ecológicos. Requieren del degustador un poco más de paciencia y sensibilidad para percibir los suaves matices que la sabia naturaleza brinda.

Si quieren iniciarse en el mundo de los vinos naturales, aquí seis buenos ejemplos:  

Viñas de Alto Salvador Rosado 2012 ($29): Un rosado con certificación orgánica casi desconocido en el mercado local -se exporta la mayoría-, elaborado por una pequeña bodega del dpto. San Martín (Mendoza). No posee mención varietal en la etiqueta, pero por sus características organolépticas podría inferir que está elaborado con uvas Malbec. Un vino directo y simple; de color cereza brillante, con nítidos aromas frutados y algo herbáceos. En la boca tiene una entrada amable, cuerpo medio, sensación frutal intensa, correcta acidez y buena persistencia ¡Un vino bien natural, en un precio muy lógico!

Buenalma Malbec Rosé 2011 ($75): Este rosado es el primero en nuestro país con certificación biodinámica -una forma de cultivo sustentable que además rige sus labores por los ciclos de la naturaleza-, y está elaborado en la Finca Dinamia (San Rafael). Esta finca es el proyecto personal de Alejandro Bianchi -descendiente de una tradicional familia bodeguera del sur mendocino- para elaborar vinos orgánicos y naturales. El vino el cuestión seduce con una tonalidad rosada radiante, límpida y vivaz. En la nariz los aromas son de frutas frescas (frutillas, frambuesas); dando paso a una boca ligera, fresca y muy disfrutable ¡Un rosado algo caro, pero que representa una buena introducción a los vinos de producción biodinámica!

Noble de San Javier Malbec 2012 ($40): Reconozco tener una gran predilección por los vinos de esta bodega cordobesa, elaborados con mucho esfuerzo y pasión por la familia de Nicolás Jascalevich. Desde el comienzo estos vinos han sido elaborados en pequeña escala, con máxima consideración por el entorno natural e ínfima intrusión enológica. Este año me sorprendieron gratamente con este tinto joven absolutamente “desnudo” pero exquisito. Un malbec de Traslasierra que no necesita de ningún “maquillaje” para destacarse y cautivar. Fue fermentado solo con levaduras silvestres en tanques de acero inoxidable. Posee nítidos aromas frutales (ciruelas, moras) y toques herbáceos; que se abren a una boca sabrosa, plena, de gran balance y frescura sostenida. Cada vez que lo pruebo me da la impresión de estar comiendo la uva en estado puro, sin artificios ni retoques. Una experiencia diferente -a un precio moderado al que todos pueden acceder- que realmente vale la pena. ¡Un vino natural que juega de local!

Familia Cecchín Carignan 2008 ($50): Alberto Cecchín es un viticultor mendocino, tercera generación de una familia que se ha dedicado a las labores agrícolas desde hace casi un siglo. Elabora vinos orgánicos en su pequeña finca y bodega de Russel (Maipú). Es el único bodeguero nacional que pertenece a la asociación de origen francés  “AAA” -Agricultores, Artesanos y Artistas-; un grupo que nuclea a los viñateros que elaboran sus vinos de manera absolutamente natural y con superlativo respeto por la naturaleza. De todos sus productos, este es el que más me gusta por su singularidad. Un tinto elaborado con la cepa Carignan -originaria del Ródano y muy utilizado en Chile, pero casi desconocida en nuestro medio-. Muestra aromas de gran sutileza y complejidad -a pesar de no haber recibido crianza en madera-, que se mueven entre lo especiado y las frutas pasas, más algunos dejos minerales/terrosos muy agradables. En la boca es bien  fluido y suelto, de paso franco, repite sensaciones frutales, con taninos apaciguados y considerable persistencia. ¡Rareza absoluta, que no se puede dejar de probar!    

Dieter Meier Puro Cabernet Sauvignon 2011 ($75): Dieter Meier es un polifacético artista y músico de origen suizo, quien entre un sinfín de actividades y proyectos por todo el mundo, tiene en Mendoza la Finca “Ojo de Vino”. Allí se producen vinos con certificación orgánica, que se exportan en su gran mayoría (95%). Desde el año pasado, una pequeña fracción de lo producido en este emprendimiento también se comercializan en el país. Este Cabernet Sauvignon es joven y bastante liviano -para lo que uno espera del cepaje-. La primera nariz nos trae agradables aromas de frutas negras maduras, que luego se van abriendo a trazos especiados y algo de cuero. La boca es ágil, sabrosa, con taninos bastante suaves -a pesar de su juventud- y moderada persistencia. ¡Un tinto para ávidos buscadores de novedades!   

Paradigma 2009 ($146): Este es uno de los grandes tintos argentinos, elaborado por las manos sabias de un “prócer” de la enología nacional como es Don Ángel Mendoza. Este producto se vinifica en la pequeña bodega familiar “Domaine St. Diego” (Lunlunta, Mendoza) con un assamblage de las mejores uvas Malbec, Cabernet Franc y Cabernet Sauvignon. Es otro tinto que no ha tenido ningún contacto con roble, y sin embargo es sumamente voluminoso, complejo y muy longevo. Este vino seduce desde el color, violáceo vivaz y profundo. Los aromas ofrecen una intensa paleta de tonos balsámicos, especiados y frutales confitados. Tiene una boca pletórica de sabores, donde vuelve a aparecer la confitura de frutas; ofrece una acidez firme y refrescante, taninos sosegados, excelente balance y una persistencia casi eterna. Una botella para tomar ya o guardar sin problemas un par de años más. ¡Soberbio exponente de la vitivinicultura nacional, que demuestra que la madera no siempre es necesaria para hacer grandes vinos! 

¿Y a ustedes, los tientan los vinos naturales?¿Conocen algún otro para agregar a la lista?

Con Alberto Cecchin, incansable defensor de los vinos naturales

Si quieren leer otra opinión sobre estos vinos, aquí una nota del bloguero Fabián Mitidieri.

**Esta nota fue publicada originalmente en la web cordobesa de Circuito Gastronómico**

miércoles, 17 de abril de 2013

MALBEC WORLD DAY

Hoy miércoles 17 de abril se celebra -por tercer año consecutivo en todo el mundo- el Malbec World Day (Día Mundial del Malbec); una iniciativa de Wines of Argentina (WofA) para darle difusión internacional a nuestra cepa emblemática.


Los festejos previstos para este año incluyen más de 70 actividades artísticas, culturales y sociales en 60 ciudades alrededor del globo, con el vino Malbec como eje central de las acciones. En nuestro país el acto central se desarrollará en la ciudad de Mendoza.

Para este 2013 se decidió destacar al Malbec como una expresión artística y cultural; enlazandolo con la fuerza comunicacional del “street art”. En este sentido, Alberto Arizu hijo (Presidente de WofA) expresó: “este año los esfuerzos de Wines of Argentina se centrarán en integrar a los nuevos consumidores. Es por esto que el Argentina Wine Awards estuvo orientado a la “Next Generation” y ahora el Malbec World Day se alinea y hace un paralelismo entre el street art y el trabajo de los enólogos, que en definitiva son los artistas que toman los elementos del terroir y los combinan para comunicarlos al mundo a través de sus vinos”.


Este evento -pensado principalmente para el mercado externo- busca afianzar en la mente de los consumidores extranjeros la relación indisoluble entre la uva malbec y la República Argentina, así como “ratificar la estrategia de utilizar al malbec como punta de lanza para abrir nuevos mercados del mundo, generando posicionamiento de marca país como productor de vinos de alta gama" (según palabras de Arizu hijo).

Sin ánimo de ser ofensivo, me parece que esta celebración tiene escasa trascendencia en nuestro país, pues los eventos que se realizan aquí son muy elitistas. Se habla mucho de este día en los medios, pero para la mayoría de los consumidores locales no representa absolutamente nada (probablemente muchos ni siquiera sepan de estas actividades). Entiendo que la mayor parte de los esfuerzos están puestos en el extranjero, pero WofA debería darle una mayor difusión local, democratizando un poquito más los festejos. Quizás se debería pensar en algunas actividades “abiertas” en distintos puntos del país, como degustaciones, charlas, intervenciones artísticas, promociones en vinotecas, etc.

El Malbec en Argentina:

www.bettyswinemusings.com

La uva malbec es una uva originaria de la Región de Cahors (en el sudoeste de Francia). Fue considerada allí siempre una uva menor, utilizándose principalmente para cortes.

No se sabe exactamente como llegó al país, aunque la versión más confiable le atribuye a Michel Aimé Pouget (enólogo francés contratado por el presidente Sarmiento para que trabaje en Mendoza a mediados del siglo XIX) la introducción de los primeros plantines de este cepaje. 

En la actualidad existen unas 28.500 hectáreas implantadas, lo que la convierte además en la variedad vinífera más importante de nuestro territorio. La provincia de Mendoza concentra casi las dos terceras partes de esta superficie, siendo así el centro de la producción de este cepaje.

Viñedo de Malbec en Familia Zuccardi (foto propia)

Los vinos de Malbec:

La uva Malbec es sumamente versátil, por lo que permite elaborar una amplia variedad de vinos. Los vinos de esta variedad son siempre sabrosos y agradables de tomar; con taninos amables y aromas frutados que recuerdan a ciruelas, cerezas y mermeladas.

Si bien este cepaje no es mi favorito, estoy en un todo de acuerdo con que Argentina elabora varios de los mejores ejemplares del mundo, y disfruto mucho bebiéndolos.

También he tenido la suerte de probar algunos notables exponentes de su Cahors natal;  buenos vinos aunque en un estilo totalmente distinto al nuestro (mayor potencia, taninos recios, acidez más firme, profundidad de aromas). No podría decir si son mejores o peores -pues son distintos-, aunque me parecen un poquito menos “amigables con los paladares nuevos” que los nuestros.  


Mis Malbecs:

Este año he elegido dos Malbec para recomendar. Uno muy accesible y con excelente relación precio-calidad, así como otro de precio muy elevado pero que me encanta.

Santa Florentina Malbec 2012 ($19):

 

Seguramente este no es el mejor Malbec que se elabora en la provincia de la Rioja, pero sí el más sencillo de encontrar y habitualmente en un precio accesible. Un tinto simple y muy agradable de beber; elaborado en formidables volúmenes por la Cooperativa Vitivinícola La Riojana, manteniendo siempre una calidad interesante. Sus aromas son frutados y herbáceos directos; ofreciendo un paso por boca ligero y veloz, con alcohol moderado y persistencia media. ¡Un Malbec para todos los días, sin gastar demasiado! RPC Muy Buena

Trapiche Gran Medalla Malbec 2008 ($225):


Cuando un vino es de alta calidad, se nota desde el principio. Un tinto de aspecto limpio y brillante, con un color profundo y vivaz que se mueve en la paleta de las tonalidades rojo-violáceas. La nariz ofrece aromas de buena intensidad, seductores y complejos; las notas frutales maduras se integran a la perfección con los tonos de crianza (ahumados, especiados, balsámicos) y algunos delicados trazos minerales. A llevarlo a la boca es un vino intenso y pletórico de sabores, voluminoso pero fluido, de acidez magistralmente calibrada, taninos firmes pero dulces y una persistencia casi eterna. RPC Correcta.

Más sobre nuestro Malbec:

Si quieren ver otras recomendaciones de vinos malbec para celebrar este día, pueden visitar los sitios web de los colegas Blogueros del Vino:

lunes, 15 de abril de 2013

3 x 15

Hace algunas semanas, un buen amigo me pidió que le hiciera una lista con los mejores vinos de Argentina. Le dije que eso era sumamente difícil; dada la inmensa cantidad de vinos disponibles en el país, los diferentes segmentos de precios, los diversos estilos de productos vínicos y -por supuesto- el gusto personal de cada bebedor.

Sin embargo, ese intercambio me dejó pensando y dio pié a esta breve nota (que obviamente se la enviaré a mi amigo de inmediato, a modo de respuesta). 

Lo que hice fue pensar en tres vinos que me gusten particularmente, en quince categorías o estilos que previamente había definido según mi criterio (donde también se puede apreciar mis preferencias personales, sin dudas).

No sé si en esta enumeración están todos los grandes vinos del país; lo que si estoy seguro es que están aquellos que a mí “me mueven el piso” por alguna razón.

Aquí mi selección del “3x15”, tal como quedó luego de muchísimas relecturas y correcciones:

1-Tres blancos baratos y cumplidores (hasta $35):
Estancia Mendoza Chardonnay-Chenin 2012 ($15)
Castel Blanco ($26)
Cafayate Torrontés 2012 ($28),  

2-Tres blancos de alta calidad (sin problemas con el precio):
Angélica Zapata Chardonnay 2008 ($170)
Luigi Bosca Gala 3 2010 ($180)
Lagrima Canela 2009 ($200).

3-Tres rosados que no hay que dejar de probar:
Santa Julia Syrah Rosado 2012 ($31)
Carmela Benegas Cabernet Franc Rosé 2011 ($65)
Finca La Anita Petit Verdot Rosado 2012 ($110)

4-Tres tintos de Malbec ricos y de precio moderado (hasta $60):
Marcus Malbec 2011 ($29)
Norton DOC Malbec 2009 ($48)
CarinaE Malbec 2011 ($55)

5-Tres tintos de Malbec de alta calidad (sin problemas con el precio):
Trapiche Gran Medalla Malbec 2008 ($225)
DV Catena Vineyard Designated Adrianna Tupungato Malbec 2005 ($350)
Dolium Gran Reserva Malbec 2008 ($500)

6-Tres tintos de Cabernet Sauvignon ricos y de precio moderado (hasta $60):
Portillo Cabernet Sauvignon 2011 ($34)
Viñas de Narvaez Cabernet Sauvignon 2009 ($40)
Weinert Reserva Cabernet Sauvignon 2005 ($60)

7-Tres tintos de Cabernet Sauvignon de alta calidad (sin problemas con el precio):
Noble de San Javier Reserva Cabernet Sauvignon 2011 ($80)
Sottano Reserva de Familia Cabernet Sauvignon 2010 ($150)
Bramare Reserva Marchiori Vineyard Cabernet Sauvignon 2009 ($330)

8-Tres tintos varietales baratos y cumplidores (hasta $35):
Mil Piedras Sangiovese 2009 ($30)
Los Clops Pinot Noir 2012 ($32)
Trapiche Origen Syrah 2011 ($33)

9-Tres tintos varietales de alta calidad (sin problemas con el precio):
Dolium Petit Reserva Syrah 2009 ($135)
Zuccardi Q Tempranillo 2008 ($150)
Finca La Anita Gran Merlot 2009 ($160)

10-Tres tintos genéricos de alta calidad (sin problemas con el precio):
Pura Sangre 2007 ($147)
Trapiche Medalla 2007 ($180)
Atamisque Assamblage 2008 ($210)

11-Tres espumosos ricos y de precio moderado (hasta $75):
Huzep Extra Brut NV ($50)
Finca La Linda Extra Brut ($55)
Norton Cosecha Especial Extra Brut NV ($60)

12-Tres espumosos de alta calidad (sin problemas con el precio):
Cruzat Nature NV ($100)
Rosell Boher Brut Rosé NV ($170)
Boheme Nature NV ($280)

13-Tres vinos dulces muy particulares, que no hay que dejar de probar:
Lagarde Moscato Bianco Espumoso Dulce NV ($75)
Finca La Anita Semillón de Abril 2003 ($85)
Afincado (S.V. El Yaima) P. Manseng Tardío 2008 ($105)

14-Tres vinos especiales muy particulares, que no hay que dejar de probar:
Hagmann Manzanilla S/A ($30)
Malamado Extra Dry 2008 ($80)
Los Stradivarius de Bianchi Porto de Magoas 2005 ($180).

BONUS TRACK:

Luego de esta selección, me quedó una categoría pendiente. Era la de los vinos que me habían “marcado” de alguna manera especial. Esta última selección contiene una gran subjetividad, pues no hay nada más personal e íntimo que la experiencia con los vinos.

15-Tres vinos que tengan un significado -o valor sentimental- importante:

Opus One 2000 (U$D 200): Gracias a este vino decidí virar mi profesión hacia la sommellerie. Lo probé en el año 2003 mientras trabajaba como Bartender en un crucero de la Royal Caribbean International; y me "dejó picando el bichito" de la curiosidad por los buenos vinos, que continua hasta hoy.


www.catawbafurniture.com

Humberto Canale Íntimo Cabernet Sauvignon 2009 ($50): Seguramente fue el primer vino nacional de “alta gama” -al menos en ese momento- que pude probar. Me dejó tan seducido que lo probé en todas las añadas que pude encontrar, siendo el vino que más cosechas he degustado (desde la 1998 hasta la 2009).

www.vinotecaligier.com

Vinorum Premium Malbec 1999 ($90): Un vino interesante, con una gran evolución en botella. Lo elijo pues fue el vino que bebí la noche que le propuse casamiento a mi esposa. El vino fue muy bueno, al igual que la decisión que tomé en ese momento…



SE VIENE EL DÍA MUNDIAL DEL MALBEC

Este miércoles 17 de abril se celebra en todo el mundo una nueva edición del Malbec World Day y los Blogueros del Vino haremos publicaciones conjuntas sobre nuestra cepa emblemática. A seguir conectados !!


miércoles, 3 de abril de 2013

VINO EL OTOÑO

www.winecellarage.com

“Las golondrinas dijeron adiós/ y se llevaron el tiempo estival./ El duende inquieto del atardecer/ pinta las nubes de gris./ Dueño el otoño del verde final,/ hermosa Córdoba de abril (…)/ Córdoba en otoño,/ música del alma/ tardecitas por la peatonal./ Mientras el Suquía, lento se retira,/ mirando de reojo a la ciudad./ Toda la magia que encierra tu ser/ hermosa Córdoba otoñal”.

Sin decidirse a desembarcar del todo, parece que el otoño ha llegado a nuestra ciudad; ya que los árboles empiezan a perder sus hojas, los días se están acortando y las noches se van poniendo más frescas…

Creo que esta es la época más hermosa que ofrece La Docta. Y sé ve que no sólo me gusta a mí, pues varios artistas le dedicaron inspiradas creaciones a esta estación en la ciudad, entre ellos el olvidado Walter Ramón Galindez -poeta y músico local nacido en el barrio de San Vicente en 1936-; quien escribió las bellísimas glosas de la canción “Córdoba en Otoño” que encabezan este texto.

Estamos en la estación de los contrastes; de esos días en que no sabemos cómo salir vestidos a la calle; de esas tardes en que agradecemos la piedad de un clima algo más benigno, aunque no querríamos que llegue el invierno; de esas nochecitas lluviosas y melancólicas, en que preferimos quedarnos en el cobijo del hogar viendo una película…

Es difícil elegir los vinos para este tiempo tan cambiante, así que hay que tener varias opciones a mano. Si quieren algunas sugerencias, aquí ocho buenos vinos “otoñales”:         

Piedra Negra Alta Colección Pinot Gris 2012 ($42): Sigo este vino hace por lo menos seis cosechas, y siempre me subyuga con su diáfana nariz de flores y frutas. Un blanco exquisito, de esos que gustan incluso a quienes no beben vino con frecuencia.  De perfil liviano, ágil y suavemente perfumado; acompaña con una boca de refrescante acidez y suave “petillant” (mínimas burbujas de gas carbónico, remanentes de la fermentación alcohólica). ¡Un blanco apetitoso, óptimo para “abrir boca” en una comida con amigos!

Caelum Torrontés 2012 ($50): Un torrontés mendocino que “rompe el molde” de lo que uno espera de la variedad. Un blanco de gran frescura, que desconcierta un poco en la primera olfacción (notas herbales y cítricas marcadas). Al agitarlo en la copa unos momentos aparecen los tranquilizadores aromas florales y de uvas frescas. En la boca es vivaz y gustoso, tienen una acidez filosa y final apenas amarguito -tan típico de nuestra uva emblemática- que le va muy bien. ¡Un vino para buscadores de rarezas! 

Santa Julia Merlot 2011 ($31): Esta línea clásica de la bodega Familia Zuccardi nunca defrauda, ofreciendo productos livianos y correctamente elaborados para beber a diario. Este Merlot no es la excepción; con una nariz de neto perfil frutal -y toques especiados-, que se completa con una boca bien suelta y sabrosa, de taninos suaves y adecuada persistencia para el segmento. ¡Un tinto para disfrutar en otoño, cuidando el bolsillo!

Valdeviña Reserva Pinot Noir 2010 ($45): Este vino está elaborado por la Cooperativa La Riojana, en la bodega que la empresa posee en Tupungato (Valle de Uco-Mendoza). Un Pinot Noir de color algo más subido de lo que uno espera, pero con una nariz muy  interesante para su rango (frutas maduras, frutas pasas, trazos especiados y herbáceos).  En la boca es un tinto sumamente fluido, liviano, de grado alcohólico bajo y taninos casi imperceptibles, con persistencia moderada. ¡Muy buena aproximación a esta delicada -y a veces incomprendida- uva, sin gastar demasiado!

Casarena 505 Esencia 2011 ($50): Este tinto joven es una de las últimas novedades llegadas desde tierras cuyanas, de la mano de una bodega debutante. Está elaborado con un corte de Malbec, Cabernet Sauvignon y Merlot; que ha tenido una breve crianza de tres meses en barricas francesas. El resultado es un vino de aromática seductora (frutas maduras, violetas, especias), que se abre paso a una boca ligera, bien jugosa, con gratas  sensaciones frutales y taninos moderados. ¡Un tinto sumamente versátil, para el asado o las pastas domingueras con la familia!     

Caroyense Piú Pinot Noir ($45): Un vino espumoso de producción local -vinificado por el experimentado enólogo Santiago Lauret en Colonia Caroya- que sorprende a quienes lo prueban por primera vez. Está elaborado con uvas Pinot Noir de la región y bajo el método tradicional -con 8 meses de crianza sobre lías-. El resultado es una verdadera rareza; un tinto burbujeante -si, leyeron bien, tinto- de intenso color violáceo, nariz de frutas ácidas y levaduras, seguido de una boca agradablemente seca, fresca y de burbujas moderadas. Un producto muy logrado, que sorprende gratamente -pues hay pocos exponentes de este tipo de espumosos en el mercado-. Lo imagino ideal para maridar postres de chocolates, de esos que dan ganas de comer con la llegada de las primeras noches frías. ¡Vale la pena el viaje hasta la bodega para comprar unas botellas!

Gancia Spumante Italian Secco ($60): La moda de los aperitivos desembarcó con todo en Argentina, imponiendo nuevamente los vermouths y amargos en el consumo local. Esto abrió el juego también a los espumosos livianos, ideales para preparar los famosos “spritz” del norte de Italia (mezclas de bitters, macerados y vinos gasificados). Con una rapidez de reflejos notable, la marca Gancia -emblemática del aperitivo argentino- lanzó al mercado su vino burbujeante leve. Es un producto muy simple y agradable de beber; de aromas frutales y levemente herbáceos, con paso de boca seco, veloz y refrescante. ¡Para volver a disfrutar del ritual del “vermú”, como les gustaba a nuestros abuelos!     

San Huberto Dulce Natural 2012 ($32): Los vinos dulces de buena calidad suelen ser productos de precio alto, por las dificultades que acarrea su producción. Sin embargo, aún pueden encontrarse algunas perlitas, como esta de la bodega riojana San Huberto. Un vino dulce natural elaborado con la variedad Moscato Giallo (Moscatel Amarillo), que ofrece un producto de seductora nariz (uvas frescas, damascos turcos, miel, flores blancas) y agradable paso por boca. ¡Servido bien frio -para atenuar el dulzor- puede ser un gran escolta de helados o postres frutales!

Y para ustedes, ¿cuáles son sus vinos otoñales?  


BONUS TRACK:


**Esta nota fue publicada originalmente en la web cordobesa de Circuito Gastronómico**